A partir del 1 de enero de 2025, Rumanía y Bulgaria serán miembros de pleno derecho del Espacio Schengen.
La Comisión Europea destacó este paso vital para los dos países y la Unión Europea (UE) en un comunicado de prensa.
«Esto no sólo refuerza el espacio Schengen, sino que fortalecerá aún más el mercado interior y aumentará los viajes, el comercio y el turismo», declaró la Comisión de la UE.
La Comisión subrayó que un Espacio Schengen fuerte refuerza la unidad y la fuerza de la UE a escala mundial.
La plena adhesión de Rumanía y Bulgaria a Schengen se produce después de que Austria levantara finalmente su antiguo veto.
Esto despejó el camino para que los dos países entraran completamente en la zona de libre circulación sin fronteras de Europa.
Austria levanta el veto, allanando el camino a la integración
Austria había bloqueado anteriormente la plena adhesión de Rumanía y Bulgaria a Schengen, alegando su preocupación por la inmigración irregular a lo largo de la ruta de los Balcanes.
El ministro austriaco del Interior, Gerhard Karner, explicó recientemente los motivos del levantamiento del veto.
«Podemos dar el siguiente paso en el Consejo (de Justicia y Asuntos de Interior) de la UE. Sin este veto, no se habría producido esta reducción masiva de los cruces fronterizos ilegales», afirmó.
El cambio se produce tras los avances de Rumanía y Bulgaria en la mejora de la seguridad fronteriza, que han dado lugar a un descenso significativo de las entradas no autorizadas.
Según informes austriacos, los cruces ilegales a Austria a través de Hungría descendieron de 70.000 en 2023 a sólo 4.000 este año.
La decisión es una prueba del compromiso de Rumanía y Bulgaria de cumplir las normas de la UE.
También marca un cambio en la postura de Austria, que permite la ampliación de Schengen a sus vecinos del sureste tras años de retrasos.
El camino de Rumanía y Bulgaria hacia Schengen
Rumanía y Bulgaria se adhirieron a la UE en 2007 y desde entonces han trabajado para conseguir la plena adhesión a Schengen.
Ambos países lograron la adhesión parcial en marzo de 2024, eliminando los controles fronterizos para los viajes aéreos y marítimos.
Sin embargo, las fronteras terrestres siguieron sujetas a controles debido a las objeciones de Austria y algunos otros Estados de la UE.
Estas objeciones se basaban en la preocupación por la inmigración irregular y la capacidad de gestión de las fronteras.
A lo largo de los años, Rumanía y Bulgaria aplicaron amplias reformas, mejoraron las infraestructuras de seguridad fronteriza y colaboraron con agencias de la UE como Frontex.
Sus esfuerzos acabaron ganándose la confianza de Austria y otros Estados miembros, allanando el camino hacia la plena adhesión.
La Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, acogió con satisfacción la decisión, calificándola de «día de alegría» para todos los europeos y las empresas.
Y añadió: «Juntos, cosecharemos los beneficios de una Unión más fuerte y más conectada».
Viajes y beneficios económicos para Europa
La plena inclusión de Rumania y Bulgaria amplía el Espacio Schengen a 29 países, desde Escandinavia hasta el Mar Negro.
La supresión de los controles en las fronteras terrestres ahorrará tiempo y hará más fluida la circulación sin pasaporte entre sus 29 países miembros.
Por ejemplo, los viajes por carretera entre Bucarest y Budapest o entre Sofía y Viena ya no implicarán largas paradas en los puestos de control.
Esto hace que los viajes por varios países de la UE sean más cómodos para el turismo, los negocios o las visitas familiares.
Se espera que la mejora de la movilidad impulse el turismo en Rumanía y Bulgaria, famosas por su belleza natural, sus monumentos históricos y su asequibilidad.
Las empresas de Rumanía y Bulgaria, especialmente las de logística y comercio, se beneficiarán de un transporte más rápido y costes reducidos.
Al eliminar los controles en las fronteras terrestres, las mercancías pueden circular más eficazmente por los mercados de la UE, lo que aumenta la competitividad de ambos países.
Equilibrio entre libre circulación y seguridad
Aunque la pertenencia a Schengen hace hincapié en la libre circulación, también exige una sólida seguridad en las fronteras exteriores.
Rumanía y Bulgaria asumirán ahora una mayor responsabilidad en la salvaguardia de las fronteras sudorientales de la UE.
Ambos países reforzarán su colaboración en las iniciativas europeas para mejorar la seguridad en las fronteras exteriores de la UE y abordar los problemas de la migración.
Han invertido significativamente en sistemas de vigilancia y han modernizado los pasos fronterizos.
Los dos países también se están basando en la aplicación con éxito de los proyectos piloto de procedimientos rápidos de asilo y retorno.
Además, la Comisión seguirá prestando ayuda financiera y apoyo de Frontex a ambos Estados miembros.
Este doble enfoque de la movilidad y la seguridad es la piedra angular del éxito del Espacio Schengen.
Cumplir las normas de la UE sobre visados para visitar Rumanía y Bulgaria
Rumanía y Bulgaria empezaron a expedir visados Schengen de corta duración en abril de 2024, un mes después de que se eliminaran las fronteras aéreas y marítimas.
Los ciudadanos y residentes de fuera de la UE deben cumplir las normas del Espacio Schengen cuando visiten Rumanía y Bulgaria.
Sus estancias en estos dos países se contabilizarán como parte de los 90 días de visado permitidos dentro de cualquier periodo de 180 días para estancias cortas.
En 2025, la UE pondrá en marcha dos nuevos sistemas de control fronterizo, el Sistema de Entradas y Salidas (SES) y el Sistema Europeo de Información y Autorización de Viajes (ETIAS).
El SES exigirá a los viajeros extracomunitarios que presenten datos biométricos, como huellas dactilares y escáneres faciales, al entrar y salir del Espacio Schengen.
Sustituirá al sellado manual de pasaportes para realizar un seguimiento más preciso de los viajeros y detectar las estancias excesivas en el bloque.
El ETIAS, por otra parte, exigirá a los viajeros no comunitarios, incluidos los del Reino Unido, que cumplimenten una autorización previa al viaje en línea.
Este sistema se aplica a todos los países Schengen y pretende mejorar la seguridad manteniendo la facilidad de viajar.
Se aconseja a los viajeros que se mantengan al día de las últimas normativas y de cuándo se aplicarían para evitar retrasos e interrupciones.