El Reino Unido introduce nuevas y duras leyes contra los traficantes de personas

| enero 7, 2025
El Reino Unido introduce nuevas y duras leyes contra los traficantes de personas
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El gobierno del Reino Unido (RU) ha anunciado nuevas y estrictas leyes contra la delincuencia para combatir las bandas de traficantes de personas.

Estas nuevas leyes contra la delincuencia pretenden desmantelar las redes ilegales organizadas y mejorar la seguridad fronteriza.

Se centran en los presuntos contrabandistas, imponiendo severas restricciones para desbaratar sus operaciones y reducir la inmigración ilegal.

La ministra de Interior británica, Yvette Cooper, subrayó la importancia de acabar con las bandas de traficantes de personas.

«Peligrosos delincuentes traficantes de personas se benefician de socavar nuestra seguridad fronteriza y de poner vidas en peligro», declaró en un comunicado de prensa.

Cooper subrayó: «No se puede permitir que se salgan con la suya».

Y añadió: «Daremos a las fuerzas de seguridad mayores poderes para perseguir y detener a estas viles redes de bandas.»

Nuevas competencias y leyes penales

Un elemento clave de la represión de las bandas de traficantes de personas es la introducción de Órdenes provisionales de Prevención de Delitos Graves (SCPO).

Estas órdenes permiten a las fuerzas de seguridad imponer restricciones inmediatas a personas sospechosas de actividades delictivas graves, incluso antes de que se tome una decisión judicial.

Esta intervención temprana tiene por objeto cortar de raíz las operaciones de contrabando, limitando la capacidad de los sospechosos para organizar o financiar actividades ilegales.

En virtud de estas nuevas leyes penales, los presuntos traficantes de personas pueden enfrentarse a:

  • Restricciones de viaje: Prohibiciones de viajes nacionales e internacionales para detener la participación en actividades de contrabando.
  • Controles de las comunicaciones: Restricciones del uso de teléfonos móviles, ordenadores portátiles y acceso a las redes sociales para impedir la coordinación de operaciones ilegales.
  • Supervisión financiera: Supervisión de cuentas bancarias y otras herramientas financieras para bloquear el flujo de fondos que apoyan a las redes delictivas.
  • Prohibiciones de asociación: Normas que impiden la interacción con personas concretas vinculadas a redes de contrabando.

Incumplir estas restricciones puede acarrear penas graves, de hasta cinco años de prisión.

Abordar las travesías peligrosas de pequeñas embarcaciones

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Las nuevas y estrictas medidas responden al fuerte aumento de peligrosas travesías en pateras por el Canal de la Mancha.

Según los datos oficiales del Ministerio del Interior, más de 36.800 personas intentaron el viaje en 2024.

Esta cifra representa un aumento del 25% respecto al año anterior.

Sólo en los últimos días de diciembre de 2024, 1.776 personas cruzaron el Canal de la Mancha en 38 pateras.

Este año es el más peligroso hasta la fecha, con 77 migrantes muertos al cruzar el Canal, frente a los 12 de 2022.

Esto se mantiene a pesar de los esfuerzos del Ministerio del Interior y de la Agencia Nacional contra el Crimen (NCA) para impedir los cruces, confiscar lanchas neumáticas y detener a los traficantes de personas.

Las travesías en pateras han ejercido una inmensa presión sobre el gobierno británico para que aborde la crisis.

Las bandas de traficantes de personas son un factor importante del aumento, ya que explotan a los individuos ofreciéndoles rutas ilegales peligrosas a cambio de un precio elevado.

Estas bandas delictivas han facilitado más de 150.000 llegadas en pateras al Reino Unido desde 2018.

Las nuevas medidas formarán parte del Proyecto de Ley de Seguridad Fronteriza, Asilo e Inmigración.

Este nuevo proyecto de ley pretende centrar la aplicación de la ley en las redes de contrabando, abordando al mismo tiempo cuestiones más amplias relacionadas con la inmigración ilegal.

Reforzar la colaboración internacional

El gobierno británico también está intensificando su cooperación internacional para combatir el tráfico de personas a escala mundial.

Los acuerdos con Alemania están ayudando a armonizar las leyes y a tipificar como delito la facilitación de la inmigración ilegal.

El Reino Unido también desempeña un papel activo en el Plan de Acción contra el Contrabando del G7, fomentando la colaboración en las investigaciones, el intercambio de inteligencia y la aplicación de la ley a través de las fronteras.

Más cerca de casa, el Reino Unido colabora con Francia y Bélgica para reforzar las patrullas y la vigilancia a lo largo del Canal de la Mancha.

Las operaciones conjuntas y los acuerdos de reparto de recursos son fundamentales para prevenir los intentos de tráfico antes de que los emigrantes se hagan a la mar.

Los funcionarios subrayan que la colaboración internacional es vital para desmantelar las operaciones de gran alcance de las bandas de contrabandistas.

El ministro del Interior señaló que la colaboración internacional ha dado lugar a importantes detenciones y actuaciones contra bandas peligrosas en los últimos meses.

Equilibrar la seguridad con las libertades civiles

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Imagen cortesía de Ahmed Akacha vía Pexels

Las nuevas medidas y leyes contra la delincuencia dirigidas contra presuntos traficantes de personas también han suscitado preocupación por las libertades civiles.

Los críticos argumentan que imponer restricciones sin un juicio completo podría vulnerar los derechos individuales.

El ex ministro conservador del gabinete, Sir David Davis, afirmó que los nuevos poderes y leyes sobre delincuencia suenan «innecesariamente draconianos».

«Si esto se hace simplemente sobre la base de sospechas y no de pruebas sólidas, entonces se trata de un aumento masivo de los poderes no sólo de la policía, sino de todos los organismos estatales», declaró a The Times.

El gobierno ha intentado abordar estas preocupaciones incluyendo salvaguardias en las nuevas leyes.

Los SCPO provisionales requerirán la aprobación judicial y estarán sujetos a revisiones periódicas para garantizar la imparcialidad y evitar la extralimitación.

Algunos expertos también han planteado dudas sobre la eficacia a largo plazo de la selección de sospechosos.

Las redes de contrabando suelen estar muy organizadas y sus principales operaciones tienen su base fuera del Reino Unido, lo que dificulta la aplicación de la ley.

El director ejecutivo del Consejo de Refugiados, Enver Solomon, afirmó que una aplicación más estricta de la ley por sí sola no cambiaría las cosas.

«Si no se abordan también las razones por las que la gente está dispuesta a poner en peligro su vida en primer lugar, es probable que se produzcan más viajes peligrosos y más tragedias humanas», declaró a The Guardian.

Solomon insistió en que, en su lugar, el gobierno debería establecer una estrategia de rutas seguras y legales hacia el Reino Unido.

Un enfoque global de la inmigración

Las nuevas leyes del gobierno forman parte de una estrategia más amplia para hacer frente a la inmigración ilegal.

Además de desmantelar las redes de contrabando, el gobierno está ampliando las vías legales y seguras para los migrantes que solicitan asilo.

Otros esfuerzos incluyen aumentar la cooperación con los países vecinos para gestionar los flujos migratorios.

También incluye proporcionar un mayor apoyo a las naciones afectadas por desplazamientos a gran escala.

Combinando la aplicación de la ley con esfuerzos humanitarios, el gobierno pretende abordar las causas profundas de la inmigración ilegal al tiempo que controla sus fronteras.

La revisión de las leyes sobre delitos graves del Reino Unido refleja un decidido esfuerzo por atajar la peligrosa y explotadora práctica del tráfico de personas.

El gobierno espera reducir los cruces ilegales y salvar vidas atacando estas redes de tráfico de personas.

Sin embargo, garantizar un equilibrio justo entre la aplicación estricta y la protección de las libertades civiles será clave para el éxito de estas medidas.