España ha pedido al Reino Unido (RU) que firme un acuerdo sobre el régimen fronterizo de Gibraltar antes de que entren en vigor los cambios fronterizos de la Unión Europea (UE).
El objetivo es ultimar un acuerdo sobre Gibraltar, largamente esperado, antes de la implantación gradual del Sistema de Entrada/Salida (SES ), prevista para 2025.
El SES es un sistema automatizado que registra los datos biométricos de los nacionales y residentes extracomunitarios en los puntos de entrada y salida del Espacio Schengen.
Sustituirá al sellado manual de pasaportes y hará cumplir las normas de Schengen, que limitan la estancia de los ciudadanos de fuera de la UE a 90 días en un periodo de 180 días.
La EEE afectará a todos los titulares de visados de corta duración de la UE y a los viajeros sin visado, incluidos los ciudadanos británicos y de los Territorios Británicos de Ultramar.
Gibraltar es un territorio británico de ultramar fronterizo con España, país miembro de la UE.
Sin un acuerdo, la EEE podría causar retrasos y restricciones a los residentes que crucen la frontera.
Un acuerdo, si se alcanza, ayudaría a evitar trastornos a miles de personas que viajan entre Gibraltar y España.
La presión de España por un acuerdo sobre Gibraltar
Gibraltar es un enclave situado en el extremo sur de España que ha estado bajo dominio británico desde el siglo XVIII.
El voto del Reino Unido en 2016 a favor de abandonar la UE ha provocado acalorados debates sobre la aplicación de controles de inmigración en la frontera entre Gibraltar y España.
Horas antes del Brexit, España, Gran Bretaña y la UE acordaron que Gibraltar seguiría formando parte de los acuerdos de la UE, a la espera de una solución duradera.
Esto significa que Gibraltar ha disfrutado de un régimen sin fronteras como los demás Estados miembros del Espacio Schengen.
España ha estado instando al Reino Unido a firmar un tratado que integre a Gibraltar en el Espacio Schengen, lo que permitiría un cruce de fronteras más fluido.
El ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha insistido en la necesidad de actuar con urgencia.
«Es hora de que el Reino Unido diga sí a un acuerdo equilibrado y generoso que hemos puesto sobre la mesa hace mucho tiempo», declaró Albares a Reuters.
En 2023, España y el Reino Unido estuvieron a punto de llegar a un acuerdo, pero discreparon sobre el uso y la gestión del aeropuerto de Gibraltar.
Un nuevo equipo negociador británico se hizo cargo de las conversaciones tras la llegada al poder del nuevo gobierno laborista en julio.
Sin embargo, ambas partes han guardado silencio sobre cualquier avance en el acuerdo sobre Gibraltar desde entonces.
Implicaciones de la EEE sin acuerdo sobre Gibraltar
El acuerdo sobre Gibraltar lleva varios años negociándose desde que el Brexit dejó a Gibraltar fuera de la UE.
Sin embargo, el tiempo corre a medida que se acerca la implantación gradual de la EEE en 2025.
Aunque sin relación con el acuerdo sobre Gibraltar, Albares señaló que el EEE afectaría a miles de personas de ambas partes.
Sin un acuerdo, los residentes en Gibraltar pueden encontrarse con tiempos de espera más largos debido a los controles fronterizos y a las restricciones de circulación hacia España.
Si el Reino Unido no firma el acuerdo antes de la puesta en marcha de la EEE, los residentes en Gibraltar serán tratados como ciudadanos extracomunitarios.
Esto significa que deben presentar huellas dactilares y escáneres faciales y someterse a la norma 90/180 del Espacio Schengen.
Actualmente, los titulares de la tarjeta roja de identificación (ID) de Gibraltar pueden entrar en España sin sellos en el pasaporte.
Sin embargo, es probable que este acuerdo termine cuando se ponga en marcha la EEE.
Esto podría afectar significativamente a los miles de viajeros diarios que dependen de los rápidos cruces fronterizos, así como a la economía de Gibraltar.
Unas 15.000 personas cruzan diariamente la frontera entre Gibraltar y España, entre ellas muchos trabajadores del Campo de Gibraltar.
El Gobierno de Gibraltar ha advertido a los residentes que se preparen para posibles retrasos en la frontera una vez que entre en vigor la EEE.
El sistema persigue la eficacia a largo plazo en las fronteras. Aun así, el registro inicial y las comprobaciones biométricas podrían ralentizar la tramitación fronteriza.
Los expertos en transporte, viajes y turismo advirtieron de que los retrasos podrían prolongarse más allá de la introducción inicial.
Esto se debe a que la tecnología está relativamente poco probada y a los retos que plantean los preparativos de la EEE, como la creación de infraestructuras y la formación del personal.
Puntos clave en las negociaciones del acuerdo
Quedan por resolver varias cuestiones, sobre todo en relación con el control de los puntos de entrada a Gibraltar.
España ha insistido en que sus agentes deben estar destacados en el aeropuerto y el puerto de Gibraltar para hacer cumplir la normativa del Espacio Schengen.
Sin embargo, al Reino Unido le preocupan las implicaciones para la soberanía de Gibraltar.
El ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, cree firmemente que cualquier acuerdo debe respetar la autonomía del territorio.
«Nunca renunciaremos a nuestra soberanía británica ni a ninguna parte de ella. Por ningún precio. Por ningún trato. Por ningún beneficio», dijo en un discurso pronunciado en septiembre con motivo del Día Nacional de Gibraltar.
Picardo añadió: «Hacerlo rápido no es lo que importa. Hacerlo bien es lo que importa».
Reiteró que Gibraltar preferiría seguir sin tratado antes que aceptar cualquier condición que comprometiera su soberanía.
A pesar de estos retos, ambas partes reconocen la importancia de llegar a un acuerdo.
La propuesta de España incluye la eliminación de la valla fronteriza y la concesión de libertad de circulación de personas y mercancías.
Esto beneficiaría tanto a Gibraltar como a la comarca española circundante del Campo de Gibraltar.
Se acaba el tiempo
Los próximos cambios fronterizos tienen implicaciones de gran alcance, no sólo para los residentes de Gibraltar, sino también para la región en general.
El lanzamiento de la EEE se ha pospuesto de nuevo para permitir unos mejores preparativos y una posible aplicación escalonada en 2025.
El retraso ha sido un respiro bienvenido, pero queda poco tiempo para finalizar el tratado.
Tanto España como Gibraltar reconocen que la falta de acuerdo provocará importantes trastornos a miles de personas que cruzan la frontera.
Sin un acuerdo sobre Gibraltar una vez que la EEE entre en funcionamiento, también podría acarrear posibles consecuencias económicas para ambas regiones.
Albares subrayó que España había sido flexible en las negociaciones y que la pelota estaba ahora en el tejado del Reino Unido.
Dijo que «corresponde a Gran Bretaña decidir» si quiere que Gibraltar se adhiera a la UE o imponer los controles del EEE a sus residentes.