Los visitantes que deseen introducir sus animales de compañía en el Reino Unido deben saber que existen normativas diferentes según el país de destino en el Reino Unido. Un conjunto de normas se aplica a la isla de Gran Bretaña, que comprende Inglaterra, Escocia y Gales. El otro conjunto es aplicable al país de Irlanda del Norte, que ocupa la parte septentrional de la isla de Irlanda.
Historia de las revisiones de las normas sobre la entrada de animales de compañía en el Reino Unido
En un pasado no muy lejano no era posible llevar animales de compañía al Reino Unido desde cualquier parte de Europa sin necesidad de un periodo de cuarentena. Esto se debió, aparentemente, a la amenaza de que se importara la rabia de Europa continental, lo cual, para ser justos, era una preocupación real. Hoy en día, siguen produciéndose casos aislados de rabia de vez en cuando, pero cada año son más raros.
Hasta el Brexit (la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea) llevar un animal de compañía a Europa desde Gran Bretaña, o desde el Reino Unido a Europa, era una tarea relativamente fácil. Una vez cumplidas ciertas condiciones relativas al estado de salud de la mascota, no era necesario ningún periodo de cuarentena, y así sigue siendo en la mayoría de los casos.
Sin embargo, esta situación sólo se debe a que se negociaron determinadas condiciones entre la Comisión de la UE y el gobierno británico como parte del acuerdo del Brexit. Es muy posible que esto cambie en 2024, ya que la UE está implantando actualmente el ETIAS(Sistema Europeo de Información y Autorización de Viajes) y queda por ver cómo afectará a los ciudadanos británicos que deseen introducir animales de compañía en la UE. Si continúa el actual planteamiento relajado, es probable que los ciudadanos británicos puedan traer animales de compañía a Europa sin apenas dificultades. Por otra parte, si se introducen restricciones como las cuarentenas, el gobierno británico puede responder de la misma manera imponiendo medidas similares a las mascotas de los visitantes europeos y no británicos al Reino Unido cuando se aplique la próxima ETA (Autorización Electrónica de Viaje) británica en 2024.
Normativa vigente para el transporte de animales de compañía
Las normas actuales sobre la entrada de animales de compañía en el Reino Unido se aplican a gatos, perros y (por alguna extraña razón) hurones. Para poder ser admitido sin cuarentena, el animal de compañía debe
- Llevar microchip
- Tener un pasaporte válido para mascotas o un certificado sanitario equivalente
- Estar vacunado contra la rabia (o haberse sometido a un análisis de sangre en determinadas jurisdicciones)
- En el caso de los perros, también suele ser necesario demostrar que han sido sometidos a un tratamiento contra la tenia.
- Todos los animales de compañía deben entrar en el Reino Unido por rutas y operadores de viaje «autorizados». Esto significa que la mascota debe viajar como carga si llega por avión, a menos que se trate de un vuelo chárter privado o que el perro sea un perro de asistencia registrado. Los animales de compañía que lleguen por mar sólo deben ser transportados por empresas registradas a tal efecto, y este hecho debe comprobarse antes de embarcar.
En caso de que el animal se introduzca en el Reino Unido para su venta o para un traspaso de propiedad, deberá indicarse en el formulario de declaración correspondiente.
El incumplimiento de cualquiera de los requisitos puede dar lugar a que el animal tenga que pasar hasta cuatro meses en cuarentena, siendo el propietario responsable de las tasas de mantenimiento y cargos asociados.
Los animales de compañía que lleguen de Irlanda del Norte no están obligados a utilizar una ruta o empresa de transporte autorizada.
Normas adicionales
En determinadas circunstancias se aplican normas adicionales, denominadas Normas Balai.
Entre ellas figuran:
- Mascotas traídas al Reino Unido para su reventa o para un traspaso de propiedad
- Animales que deben llegar cinco días antes o después de la llegada del propietario
- Si se introducen en el Reino Unido más de cinco animales en total, a menos que sea con motivo de un espectáculo, competición o evento deportivo, también se aplicarán las Normas de Balai.
Controles a la salida y a la llegada
Dependiendo del medio de transporte, un animal de compañía puede ser controlado en el punto de partida, a la llegada, o en ambos. Lo más probable es que los animales que lleguen en barco a Gran Bretaña y los que entren por el Eurotúnel sean controlados antes de partir hacia el Reino Unido, mientras que los que lleguen en avión serán examinados a su llegada.
Se buscará un microchip en el animal y se comprobará la documentación necesaria (pasaporte, certificado sanitario). Como el animal viajará como carga al llegar en avión, pasará por una aduana distinta a la del propietario y deberá ser recogido una vez finalizados los controles. Por lo general, esto puede organizarse a través de la compañía aérea o de viajes correspondiente, o concertándolo con los agentes de aduanas antes del viaje.
Suele ser un proceso sin problemas, pero cabe esperar que surjan problemas si:
- La documentación necesaria es incorrecta, inválida o inexistente
- No se han realizado todos los controles sanitarios y vacunaciones
- El incumplimiento de la normativa dará lugar a un periodo de cuarentena para el animal o, posiblemente, a su devolución inmediata al país de salida.
Prevención de la rabia
La mayor preocupación del gobierno británico respecto a los animales que llegan es la amenaza de la rabia. Los gatos, los perros y los hurones deben vacunarse antes de viajar, recibiendo la primera dosis de vacunas y, si es necesario, una dosis de recuerdo. La vacunación debe ser confirmada por un veterinario y el certificado necesario debe acompañar al animal en el viaje.
El curso exacto de las inyecciones, vacunas de refuerzo y análisis de sangre necesarios varía de una región a otra del mundo y se han dividido en países de la Lista de la Parte 1 o de la Lista de la Parte 2.
Parte 1 Países. Los animales procedentes de los países enumerados en la Parte 1 deben tener una de las siguientes características:
- Pasaporte para animales de compañía del país de origen
- Un Certificado Zoosanitario (o AHC) expedido en Gran Bretaña en los cuatro meses anteriores
- Un pasaporte válido para animales de compañía expedido por las autoridades británicas
- Un certificado sanitario para animales de compañía expedido en Gran Bretaña
Parte 2 Países. Por lo general, sólo se necesita un certificado sanitario británico, aunque se exige documentación adicional en determinadas circunstancias, como en el caso de animales procedentes de Australia o Malasia.
Para los países que no figuran en la Parte 1 o la Parte 2, un certificado sanitario para animales de compañía expedido en Gran Bretaña es un requisito mínimo, pero también puede haber normativas específicas sobre análisis de sangre, vacunas contra la rabia u otras vacunas.
Posibles cambios
Las normas y reglamentos siempre están sujetos a cambios y mucho dependerá de si la UE modifica sus políticas sobre el tránsito de animales cuando ETIAS entre plenamente en vigor. Si algún cambio afecta a los viajeros británicos y a sus animales, no sería de extrañar que el gobierno británico también introdujera cambios en la normativa.
En la actualidad, sería prudente que los viajeros que llegan al Reino Unido con sus animales de compañía les pusieran, como mínimo, un microchip. Una vez confirmados los planes y las fechas del viaje, deben comprobarse con suficiente antelación los requisitos precisos en materia de vacunas, análisis de sangre y cualquier otra normativa, para evitar retrasos, gastos no deseados y la posible denegación de entrada en cualquiera de los países del Reino Unido.